La facultad de farmacia de la Universidad de La Laguna (ULL) acogió en la tarde de hoy la exposición “Desarrollo y producción de las vacunas” del Dr. Luis Ortigosa, médico especialista en pediatría, doctor en medicina y cirugía por la facultad de medicina de la ULL, profesor asociado de pediatría y asesor interno del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría y miembro del Grupo Técnico de Vacunas de Canarias.
El experto en el desarrollo de vacunas inició su exposición poniendo de relieve la importancia de vacunarse como “herramienta necesaria de prevención” ante enfermedades que a lo largo de la historia han registrado una alta mortalidad, como por ejemplo la viruela. Caso particular en el que se detuvo para subrayar que “1955 fue un año clave con la creación de la llamada primera vacuna, un hecho histórico para la ciencia y para la salud. Sin embargo, y a pesar de los buenos resultados, seis años después comenzaron los movimientos contrarios al uso de este medicamento”, destacó el experto haciendo referencia al “peligro” que implican los movimientos antivacunas tan de moda actualmente.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la inoculación de vacunas evita la muerte de tres millones de personas en el mundo. Siguiendo esta línea, otro de los ejemplos expuestos fue la poliomielitis cuya prevalencia ha bajado hasta en un 99%, siendo localizados tan solo 223 casos en el mundo y aspirando a ser erradicada en 2025. “No se ha podido controlar todavía al 100% por conflictos bélicos en zonas como Afganistán, donde los talibanes se han opuesto a que se administre”, afirmó el experto en vacunación.
En esta línea, el asesor interno del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, hizo hincapié en que las vacunas que están actualmente en el mercado son seguras. “Para que estos medicamentos lleguen al hombre han tenido que pasar cuatro fases de investigación muy rigurosas, además de un proceso de farmacovigilancia”, puntualizó, al tiempo que reconoció que el proceso se ha podido acelerar gracias a la existencia previa de estudios/análisis clínicos realizados con otro tipo de coronavirus. “Hemos llegado a la vacuna del SARS-CoV2 porque la comunidad científica ya venía trabajando en ensayos con otros coronavirus y eso ha propiciado que las fases exigidas por las agencias del medicamento se solaparan y se acelerara el proceso. Hemos sido más rápidos, pero no menos seguros”.
Educación en hábitos saludables
La siguiente ponencia corrió a cargo del Dr. Antonio Cabrera de León, catedrático de medicina preventiva y salud pública en la ULL, bajo el título “Epidemiología de las enfermedades no trasmisibles”. Patologías que si bien, como puntualizó el experto, no son infectocontagiosas, sí se mantienen en la sociedad por la repetición de malos hábitos, como el sedentarismo o la dieta rica en azúcares o productos refinados.
La vigilancia de enfermedades crónicas, como la diabetes, genera curvas similares a las registradas por otras patologías, sin embargo la respuesta que se da para atajar esta situación es más lenta.
“Si nos fijamos en la mortalidad generada en Canarias por la diabetes vemos que a partir de los años 80 se registró un descenso de los fallecimientos en mujeres , sin embargo a partir del 2000 nos dimos cuenta de que el resto de España mantenía una tendencia a la baja mientras que aquí las muertes seguían subiendo”, afirmó Cabrera.
En este sentido, el catedrático de medicina preventiva y salud pública en la ULL, señaló que la “prevención y la educación en hábitos saludables” fueron claves para rebajar estas cifras influyendo directamente en las gráficas a partir de 2018, fecha en la que se logra una importante reducción de la tasa de mortalidad.
“Nadie muere de diabetes, se muere de un infarto o se usan recursos sanitarios para tratar patologías secundarias derivadas de la diabetes como la amputación de los miembros inferiores. Una circunstancia que genera a su vez el colapso de los recursos sanitarios canarios”, explicó.